Argenis, en su
preparación para abrir un negocio de gastronomía, ha encontrado una oportunidad
de generar ingresos, con ayuda de su esposa, sin dejar su empleo y que representaría, además, entrenamiento para cuando
tenga su propia empresa. Solicita a su mentor, Armando, ayuda para evaluar la
viabilidad de comercializar accesorios de cocina fabricados por un amigo en
común, sin recurrir, por el momento, a un préstamo bancario.
El emprendedor pasa
por varias etapas desde que tiene una idea hasta que la lleva a la realidad. No
todas son realizables, bien sea porque los recursos para ejecutarlas son
insuficientes, porque requieren un nivel de conocimiento muy específico que no
se posee, el marco legal o cultural no acepta el producto o servicio, entre
otras razones. Para conocer si un sueño es viable, es imprescindible hacer un
plan de negocios que permita revisar los aspectos que lo afectan.
La capacidad
financiera es una de las limitantes más importantes a la hora de emprender por
lo que la primera tarea debe ser evaluar la factibilidad del proyecto. Y, si el
análisis determina que hay suficiente mercado, se cuenta con el conocimiento
apropiado y la normativa legal es favorable, hay que determinar la cuantía de
los recursos disponibles y el monto total de la inversión para, con esto,
establecer cuál sería la cantidad de dinero a buscar, mediante préstamos o
inversionistas.
El emprendedor,
preocupado por la estabilidad económica de su hogar, conoce con exactitud el
monto mínimo requerido para cubrir gastos fijos y su capacidad de endeudamiento, la cual depende
del nivel de ingresos. Es muy probable que le corresponda hacer ajustes al
presupuesto familiar para disminuir gastos y construir un fondo de emergencias
en preparación para el momento de iniciar su propia empresa e informar de ello
a su familia para que comprendan el porqué de los cambios.
Una vez conocido el
monto requerido y la cantidad con que cuenta el emprendedor, es posible saber
cuánto dinero adicional hace falta. Es este el momento de determinar a qué
fuentes de financiamiento recurrir: socios capitalistas, inversionistas,
institución financiera, organización que apoya emprendedores. Para iniciar la
búsqueda de fondos hay que contar con un plan de negocios y si se pretende optar
por un préstamo bancario, garantías que lo respalden.
Argenis, una vez
realizada la evaluación de la oportunidad de comercializar accesorios de cocina
sin abandonar su empleo actual, reconoce, con la ayuda de Armando, que es una
buena alternativa para generar ingresos adicionales que podría invertir en su anhelo
de empresa de gastronomía. Además, le permitirá aumentar su red de contactos en
el mundo culinario y profundizar su conocimiento de este mercado para el
momento en que ponga en marcha su negocio, en dos años.
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