En
tiempos de pandemia, mejor es la telemedicina
Los proveedores de atención médica han
tenido que adaptarse a los cambios impuestos por el distanciamiento social y
han hecho de la telemedicina su gran aliada para brindar atención a distancia,
disminuyendo así el número de exposiciones en centros médicos.
Las compañías de seguro se han
apoyado en la telemedicina para garantizar una atención médica apropiada y
oportuna a sus asegurados sin que tengan que salir de sus casas.
Dentro de los usos de la telemedicina
se pueden mencionar:
- Examinar
a pacientes que tal vez tengan síntomas del COVID-19 y
remitirlos según corresponda.
- Brindar
atención de urgencia de bajo riesgo para afecciones distintas del COVID-19
- Acceder
a proveedores de atención primaria y especialistas
- Brindar
orientación y apoyo a los pacientes para el manejo de afecciones crónicas
- Monitorear
los signos clínicos de ciertas afecciones crónicas (presión arterial,
glucosa en sangre).
- Participar
en el manejo de casos de pacientes que tengan dificultades para acceder a
la atención (adultos mayores, personas con movilidad limitada).
- Realizar
el seguimiento de los pacientes después de la hospitalización.
- Proveer
educación y capacitación al personal de atención médica a través de
interconsultas (para hospitalización o tratamiento ambulatorio) entre
colegas profesionales que no estén disponibles a nivel local, en especial
en zonas rurales.
Antes de ir a un centro médico, bien
vale la pena hacer una consulta por teléfono o video llamada en la que
recibirás la mejor orientación en relación a tu malestar o dolencia. Si el
médico que te atiende considera que debes acudir a un centro de salud, te lo
hará saber.
Te sorprenderás al descubrir que la
mayoría de las consultas presenciales pueden hacerse, exitosamente, vía remota.